El Congreso Nacional de Honduras vuelve al centro de la controversia luego de que diputados protagonizaran un nuevo enfrentamiento, lo que ha generado reacciones en distintos sectores de la sociedad.

La reciente crisis política en el Congreso Nacional ha generado un repudio generalizado en diversos sectores de la sociedad hondureña, tras evidenciarse una nueva confrontación entre bancadas por la aprobación del presupuesto especial para las elecciones generales.

Analistas advierten que la falta de consensos y el uso político de esta situación podrían llevarse de encuentro la democracia en el país.

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El conflicto radica en que la oposición se niega a aprobar los fondos electorales si estos se incluyen en la misma acta que los préstamos provenientes del CAF (Banco de Desarrollo de América Latina), mientras que el oficialismo insiste en que no cederá terreno en su postura.

Esta disputa podría retrasar aún más la disponibilidad de recursos clave para el proceso electoral, en un año políticamente sensible.

Expertos consideran lamentable la conducta de algunos diputados, señalando que existe una intención de presionar para obtener beneficios económicos mediante este tipo de negociaciones.

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Otros responsabilizan directamente a la directiva del Congreso Nacional, a quienes acusan de actuar por la fuerza, sin respeto a las leyes ni capacidad de diálogo.

Asimismo, hay quienes coinciden en que los diputados de todas las bancadas están priorizando sus intereses personales, dejando de lado el bienestar del país y contribuyendo a una creciente incertidumbre nacional.

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