FUNDANIQUEM en alerta por ingreso masivo de menores con quemaduras graves
FUNDANIQUEM: Un niño de tan solo dos años, identificado como Ismael Antúnez, perdió la vida en el Hospital Atlántida debido a graves quemaduras tras un incendio en la colonia Los Laureles en La Ceiba.
El pequeño sufrió quemaduras de tercer grado, que lo llevaron a la muerte luego de que no se pudiera trasladar a tiempo FUNDANIQUEM en Tegucigalpa debido a la falta de disponibilidad y los protocolos médicos.
El trágico incidente ocurrió cuando la madre del menor, junto con otros familiares, intentó rescatar al niño de las llamas. La mujer relató que, al escuchar los gritos de su hijo, intentó ingresar a la vivienda, pero las llamas lo hicieron imposible.
Lea También: Tegucigalpa registra cerca de 40 denuncias semanales por maltrato infantil en 2025Declaraciones de la familia del menor:
A pesar de las graves quemaduras, la familia logró sacar al niño, pero debido a la demora en el servicio de bomberos y la falta de ambulancia, se tuvo necesario trasladarlo al hospital de manera privada.
El pequeño. atendido en el Hospital Atlántida, pero la falta de una sala especializada para tratar este tipo de quemaduras graves complicó su estado.
Aunque los médicos recomendaron estabilizarlo antes de enviarlo a la Fundación del Niño Quemado en Tegucigalpa, la falta de cupo y la normativa que exige un proceso previo de debridamiento quirúrgico en el hospital de referencia impidieron que el niño recibiera la atención a tiempo.
La situación ha generado una gran consternación en La Ceiba, donde los padres del niño lamentaron las deficiencias en la atención y la falta de recursos para prevenir tragedias como esta.
La madre del menor mencionó la difícil situación que enfrentan las familias en su comunidad debido a la falta de servicios médicos adecuados y la pobre respuesta ante emergencias.
Lea También: Francisco Morazán y El Paraíso lideran los departamentos de Honduras con más decesos por accidentes de tránsitoAlerta por la saturación en FUNDANIQUEM
La tragedia de Ismael Antúnez se suma a una creciente preocupación por la sobrecarga en la Fundación para el Niño Quemado (FUNDANIQUEM), que actualmente se encuentra trabajando por encima de su capacidad, con un 100% de ocupación.
La institución ha reportado un ingreso masivo de niños con quemaduras graves, muchas de ellas causadas por líquidos calientes y pólvora.
Entre los ingresados, varios menores se encuentran en estado crítico, lo que pone aún más presión sobre un sistema de salud ya colapsado.
Las autoridades de la fundación han señalado que, con hospitales de capacidad limitada y condiciones precarias, el sistema no está respondiendo adecuadamente a las necesidades de atención especializada para los niños quemados.
Lea También: En video queda captado el trágico accidente en que falleció abuela y nieta en Lepaera, LempiraAdemás, las autoridades piden una revisión de las políticas de seguridad y la mejora en los protocolos de atención ante estos casos para evitar más tragedias.
Este dramático suceso pone en evidencia la grave crisis en el sistema de salud, en particular en la atención a niños quemados, y la necesidad urgente de tomar medidas para evitar que más menores pierdan la vida debido a la falta de recursos y atención médica oportuna.
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