Un niño de apenas tres años murió en su fiesta de cumpleaños luego de dispararse accidentalmente mientras manipulaba un arma de fuego.
La policía local informó que el niño presentaba una herida de bala en el pecho, por lo que tuvieron que trasladarlo de urgencia a una estación de bomberos, donde falleció por la gravedad de las lesiones.
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Según la información preliminar, el menor estaba celebrando su tercer cumpleaños con su familia y amigos, cuando los adultos presentes escucharon un disparo mientras jugaban a las cartas.
De acuerdo a los investigadores, el arma cayó del bolsillo de uno de los parientes que llegó a la fiesta del pequeño, en Porter, Texas, Estados Unidos.
Disparos accidentales
La organización Moms Demand Action, informó que estos incidentes aumentaron desde el cierre de escuelas por la pandemia de la COVID-19.
Esta institución se creó para luchar contra el aumento de armas de fuego en Estados Unidos, país en el que un tercio de los adultos posee al menos una de estas.
El representante de la organización en Texas, Christine Parker, indicó que “con más niños en casa durante la pandemia, es más importante que nunca tener un espacio de almacenamiento seguro. Hay mucho en juego”.
Por su parte, a asociación Everytown for Gun Safety, reveló que al menos 97 muertes están relacionadas con “disparos no intencionales” de menores en lo que va del año.
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Cabe mencionar que portar armas es un derecho constitucional en el país norteamericano, algo que se relaciona con las casi 40.000 personas que mueren cada año por disparos en delitos, accidentes o suicidios.
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