Habitantes de la zona norte de Honduras crean refugios improvisados en medio de temporada ciclónica
Las fuertes lluvias que afectan la zona norte de Honduras están causando graves daños, especialmente en municipios como El Progreso, Yoro, donde decenas de familias viven en constante incertidumbre ante el riesgo de inundaciones y desbordamientos.
Esta situación no es nueva; en años anteriores, las temporadas ciclónicas han dejado daños similares, afectando tanto la infraestructura como la calidad de vida de los habitantes.
Ante la ausencia de soluciones estructurales, las comunidades han tenido que improvisar refugios para protegerse durante la temporada de lluvias y ciclones.
En la colonia Duarte, en El Progreso, Yoro, muchas familias se han desplazado hacia el centro de la ciudad buscando un lugar seguro. Estos refugios son precarios y reflejan la vulnerabilidad de la población, que además enfrenta carencias básicas como alimentos y medicinas.
Una residente comentó con preocupación: “Solo pedimos, primero a Dios, que tapen ese hoyo, porque siempre sufrimos, tanto en lo material como económicamente. A veces tenemos comida para los niños y otras veces no, por lo que necesitamos ayuda”. otra de las afectadas comentó, “Las necesidades principales son pan y alimentos, porque aquí la mayoría estamos en esta situación. También necesitamos medicinas, como acetaminofén, para cualquier dolencia”.
Lea También:Inundados, con hambre y acechados por cocodrilos, así sobreviven las familias de El Cubulero, Alianza, Valle
Falta de respuesta y riesgos para la población
A pesar de la gravedad de la situación, la ayuda gubernamental y de otras instituciones ha sido insuficiente y tardía, dejando en riesgo a quienes viven en las zonas bajas y más vulnerables de El Progreso.
Esta falta de respuesta ha generado sentimientos de abandono y desesperanza entre los afectados, quienes exigen la construcción urgente de bordos que contengan las aguas y eviten futuras inundaciones.
Lluvias en otros municipios de la zona norte
La situación es similar en Choloma, Puerto Cortes y Villa nueva, donde las lluvias continúan y las autoridades mantienen la alerta ante el riesgo de posibles desbordamientos.
En años recientes, estos municipios han sufrido repetidamente los embates de inundaciones, especialmente tras el paso de huracanes como Eta e Iota, lo que ha dejado a la población en constante vulnerabilidad.
Situación similar en otros departamentos de Honduras
La desesperación se apodera una vez más de cientos de familias en el sector del Cubulero, Alianza, Valle, sur de Honduras, donde las intensas lluvias han provocado severas inundaciones. Como cada año, los habitantes enfrentan el mismo calvario: agua dentro de sus hogares, hambre, aislamiento e incluso la amenaza de cocodrilos.
Doña Dipoldina Gómez, una de las afectadas, relata con voz quebrada: “Desde la mañana estoy acá, todos los años es esto, todos los inviernos no tenemos tranquilidad nosotros, sin comer todo el día pasamos a veces aquí”, dijo desde el segundo piso de su vivienda, donde debió refugiarse ante el avance del agua.
Así mismo, más de 900 familias permanecen incomunicadas debido al desbordamiento del río Goascorán.
Por ende, en la zona conocida como Alianza, al menos 16 comunidades quedaron aisladas cuando el caudal del río impidió hasta el paso de lanchas.
En la zona occidental del país, las fuertes lluvias han provocado el desbordamiento de varios ríos, lo que ha causado inundaciones significativas en diversas comunidades. Como resultado, muchas familias se han visto obligadas a evacuar sus hogares para resguardarse en lugares seguros, enfrentando la incertidumbre y el riesgo que conlleva esta emergencia.
Afectaciones por las lluvias en Honduras
Las recientes lluvias que azotan diversas regiones de Honduras han dejado un saldo preocupante en cuanto a afectaciones humanas y materiales. Según reportes oficiales de Copeco, un total de 1,756 familias han resultado afectadas por las inundaciones y deslizamientos provocados por las fuertes precipitaciones. De estas, 124 personas han sido declaradas damnificadas, mientras que 53 han tenido que ser evacuadas de sus hogares para salvaguardar su integridad.
La emergencia también ha cobrado víctimas indirectas: se reporta una persona desaparecida y otra lesionada, además de seis rescatados gracias a las labores de socorro desplegadas por las autoridades y cuerpos de emergencia.
En cuanto a la infraestructura, las lluvias han causado daños significativos en las viviendas de las comunidades más vulnerables. Se contabilizan 80 viviendas dañadas y 18 completamente destruidas, dejando a muchas familias sin un lugar seguro donde refugiarse.
Además, 25 comunidades permanecen incomunicadas debido a la interrupción de vías de acceso por deslizamientos y crecidas de ríos, lo que dificulta la llegada de ayuda humanitaria y aumenta la preocupación por la seguridad de sus habitantes. Esta situación pone de manifiesto la necesidad urgente de fortalecer los mecanismos de prevención y respuesta ante desastres naturales en el país.
Lea También: Video: Inundaciones en Valle provocan aumento de cocodrilos y generan alarma entre la población