Conozca el perfil de Mueller, descrito como una persona que no se deja intimidar por nadie
Tras conocerse que Robert Mueller, fiscal especial que investigará supuestos nexos del presidente Donald Trump con Rusia en su período de campaña electoral, expertos aseguraron que el mandatario tiene motivos para estar aterrado.
Mueller, fue nombrado por el Departamento de Justicia de Estados Unidos para que investigue la supuesta injerencia de Rusia en la campaña electoral estadounidense en 2016.
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A este fiscal se le considera como un hombre íntegro e independiente, lo que explica la alegría que ha traído su designación tanto entre republicanos como demócratas.
Se ha desempeñado como director del Buró Federal de Investigaciones (FBI) entre 2001 y 2013, durante las presidencias de George W. Bush y Barack Obama. Muchas veces hacía horas extras y exigía lo mismo a su equipo de trabajo.
El «Washington Post» dijo lo siguiente tras conocer que Mueller entraba en escena es este caso en particular:
«… la Casa Blanca tiene buenos motivos para entrar en pánico…”, añadiendo que es alguien que no se deja intimidar por nadie.
Sobre Mueller:
Estudió en los años de 1960 relaciones internacionales y derecho, sirvió en el Ejército durante la Guerra de Vietnam y más tarde se desempeñó como asistente del fiscal general Dick Thornburgh y como fiscal del estado de California.
El expresidente George W. Bush lo nombró en 2001 director del FBI. Apenas llevaba una semana en el cargo cuando terroristas de la red Al Qaeda lanzaron aviones contra el World Trade Center y el Pentágono.
A raíz de los atentados, Müller amplió enormemente la labor antiterrorista del FBI. El 2 de mayo de 2011, estaba al lado de Obama y la secretaria de Estado Hillary Clinton en la Sala de Emergencias para seguir la operación de un comando de fuerzas especiales que mató al líder terrorista Osama bin Laden.
Pocos meses antes de agotar su mandato se produjo el atentado contra el maratón de Boston, el 19 de abril de 2013. Dos años antes, agentes del FBI habían interrogado a uno de los autores del atentado, Tamerlan Zarnayev, pero la investigación se suspendió. Müller dijo más tarde al «Washington Post» que ese fue uno de los dos momentos en su carrera de los que menos orgulloso estaba.
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