Las intensas lluvias provocadas por la tormenta Sara inundaron diversas áreas del Hospital del departamento de Atlántida, uno de los principales centros sanitarios de la región atlántica de Honduras. El agua afectó instalaciones críticas, generando preocupación entre pacientes y personal médico.

El temporal de lluvias y viento que azotó Atlántida provocó inundaciones en áreas clave del hospital local. El agua ingresó con fuerza en el comedor y el almacén de medicamentos, dejando ambos espacios completamente anegados. Las crecientes causaron severos daños, levantando cajas, muebles y botellas de líquidos farmacéuticos.

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Por otra parte, las inundaciones recientes que afectaron el centro asistencial dejaron importantes daños, siendo las áreas de almacenamiento de medicamentos unas de las más perjudicadas. El agua ingresó a las instalaciones, provocando la pérdida de numerosos fármacos esenciales que se encontraban en la zona afectada.

Mientras tanto, equipos de emergencia trabajan para evacuar el agua acumulada y restaurar las áreas afectadas, en medio de pronósticos que advierten sobre la posibilidad de más lluvias en las próximas horas.

Otras inundaciones en la zona atlántica tras Sara

Unos 800 milímetros de lluvia cayeron sobre la zona Atlántica de Honduras, una cifra que supera las precipitaciones del devastador huracán Mitch en 1998. La Ceiba, uno de los municipios más afectados, enfrentó el desbordamiento de quebradas como la Adán, Mama Lipa y Juana Leandra, que inundaron calles, viviendas y sectores completos tras sobrepasar su cauce.

Más de veinte colonias, entre ellas Villa Neen, Buenos Aires, y Sitramedhys Satuyé, reportaron daños severos. A pesar de la llegada de equipos de rescate, la magnitud del desastre sobrepasó la capacidad de respuesta, dejando a muchas familias a merced de las aguas, que alcanzaron niveles a la cintura.

Ante la emergencia, decenas de personas evacuaron por sus propios medios.  Decenas de personas abandonaron sus hogares por cuenta propia ante la emergencia registrada en Atlántida.

Por su parte la Secretaría de Gestión de Riesgos y Contingencias Nacionales (Copeco), mantiene una alerta roja para la zona, instando a los residentes a tomar precauciones y evacuar áreas de alto riesgo. Las condiciones climáticas adversas continuarán aunque SARA haya abandonado el país, según el Centro Nacional de Estudios Atmosféricos, Oceánicos y Sísmicos (Cenaos).

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