La madrugada del miércoles inició con un fuerte operativo en las oficinas de Koriun Inversiones, empresa intervenida por las autoridades por su presunta participación en un esquema financiero irregular.

Agentes del Ministerio Público y efectivos de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC) realizaron allanamientos simultáneos en varias ciudades del país, incluyendo Choloma, Santa Bárbara y Copán.

Frente a las instalaciones, una multitud de personas se aglomeró para evitar el decomiso de dinero en efectivo. En medio del caos, muchos exigían explicaciones sobre el paradero de sus ahorros y reclamaban transparencia en el proceso.

Algunos incluso intentaron obstaculizar la salida de los vehículos oficiales, lo que derivó en enfrentamientos menores con las autoridades.

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Esquema financiero insostenible

Según informes de la Unidad de Inteligencia Financiera de la Comisión Nacional de Bancos y Seguros (CNBS), Koriun Inversiones funcionaba bajo un esquema Ponzi, caracterizado por prometer retornos extraordinarios del 5% semanal —es decir, un 20% mensual— a sus inversionistas.

En total, se estima que más de 100,000 personas depositaron su confianza y dinero en esta plataforma financiera, la mayoría sin conocer el riesgo real que implicaban dichas operaciones.

Los reportes también señalan que la empresa no contaba con autorización legal ni con respaldo financiero suficiente para operar. Sus campañas se habían viralizado en redes sociales, especialmente en TikTok, donde ofrecían historias de éxito y ganancias rápidas.

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Incertidumbre y desesperación

Con el aseguramiento de bienes, cuentas bancarias y oficinas, la preocupación entre los inversionistas ha crecido. Muchos de ellos depositaron todos sus ahorros, con la esperanza de encontrar una alternativa económica en medio de la crisis.

A pesar de los aseguramientos, la incertidumbre reina. Las autoridades han prometido continuar con las investigaciones, pero por ahora, miles de hondureños siguen esperando una respuesta clara sobre el futuro de su dinero.