El boxeador hondureño, Teófimo López, una vez más hace historia, no solo en el ring, sino que también en el mundo del entretenimiento.
Vestido como Deadpool, llegó el hondureño López a las arenas de Michelob Ultra, en las Vegas, a su pelea contra el estadounidense Jamaine Ortiz.
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Y es que el campeón hondureño, defendió una vez más su título de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), en una noche célebre en Las Vegas.
Aunque más que la victoria de Teófimo, lo más impactante fue el atuendo con el que llegó, lo que causó furor en las personas.
Caracterizado como Deadpool, ingresó al espacio el vencedor y ofreciendo una espectacular actuación, ingresó al ring, demostrando una vez la versátil que puede llegar a ser.
La habilidad que López tiene para poder cautivar a la audiencia queda demostrada en cada participación a la que el hondureño se presenta.
Tras un combate muy reñido, el hondureño retuvo su corona del peso superligero de la OMB, se impuso por decisión unánime, (117-111, 115-113, 115-113), pero no sin segura frustración ante la falta de acción de su contrincante.
«No quería pelear, solo corría», expresó López, visiblemente descontento con la táctica defensiva de Ortiz. «¿Cómo puedo ir a por un peleador que no quiere pelear?», debatió ante su esquina al sonar la campana.
Consolidándose como como la figura destacada en el mundo del boxeo, Teófimo cuenta con un estilo único e indiscutible. López, lleva más allá los límites del deporte tradicional, cautivando a todas las personas con peculiaridad en su forma de accionar.
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