La tormenta tropical Sara ha impactado de manera significativa varias regiones del país, dejando a su paso fuertes lluvias y vientos que han provocado inundaciones en diversas localidades.
La tormenta tropical Sara, que se encuentra en el Mar Caribe, ha generado fuertes lluvias y vientos intensos que están afectando varias regiones de Honduras. Desde su formación, ha ido avanzando hacia el territorio hondureño, provocando inundaciones, deslizamientos de tierra y daños en infraestructuras en varios departamentos.
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En redes sociales se han difundido numerosos videos que dan cuenta de los severos daños causados por este fenómeno natural, el cual mantiene en alerta roja a varios departamentos del país.
En varias colonias de la ciudad de La Ceiba, ubicada en el departamento de Atlántida, al norte del país, ya se reportan calles completamente inundadas. Las intensas lluvias generadas por el fenómeno han provocado el desbordamiento de drenajes y afectado el tráfico en diversas zonas, generando preocupación entre los residentes que enfrentan dificultades para movilizarse.
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El mercado San Isidro, ubicado en La Ceiba, ha sufrido serios daños debido a las intensas lluvias que han provocado inundaciones en varios de sus locales. Los comerciantes han reportado que el agua ha afectado productos y estructuras.
En el cabo del departamento de Gracias a Dios, los pobladores han captado imágenes que muestran cómo el agua ha comenzado a cubrir las calles, acercándose peligrosamente al nivel de varias viviendas.
En Puerto Cortés, las intensas lluvias y los fuertes vientos han mantenido en alerta a los pobladores, quienes se muestran preocupados por los posibles efectos del fenómeno climático.
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En Roatán, zona insular del país, los pobladores, desde los más pequeños hasta los adultos mayores, están buscando desesperadamente la manera de salvaguardar sus vidas ante la amenaza del fenómeno natural.
Asimismo, en la aldea El Prado, ubicada en Jutiapa, Atlántida, se reportó el colapso del muro de una escuela, que cedió debido a las intensas lluvias que azotan la zona. El derrumbe ha generado alarma entre los residentes y autoridades locales, quienes ya están evaluando los daños y tomando medidas para garantizar la seguridad de la comunidad.
Las autoridades han instado a la población hondureña a mantenerse informada sobre cualquier cambio en las condiciones climáticas y a no exponerse innecesariamente a los riesgos del fenómeno.
Se recomienda seguir las instrucciones de los organismos de protección civil y evitar transitar por zonas vulnerables a inundaciones o deslizamientos de tierra.
