La Policía Nacional informa sobre un lamentable incidente ocurrido en la colonia Pineda del municipio de San Manuel, Cortés, donde un funcionario activo de la Dirección de Lucha Contra el Narcotráfico (DLCN) disparó contra tres agentes policiales, resultando heridos durante una intervención de emergencia por un caso de violencia doméstica.

Los hechos se originaron a raíz de una denuncia recibida en el sistema de emergencias policiales, que alertaba sobre un individuo en estado de ebriedad agrediendo físicamente a su pareja. En respuesta a la denuncia, agentes de la Unidad Metropolitana de Prevención No. 9 (UMEP-9), bajo la coordinación operativa del Comisario de Policía Adán Estrada Carias, se dirigieron al lugar.

Agente de la DNLC reaccionó de forma violenta

Al intentar dialogar con el agresor, este reaccionó violentamente, disparando en varias ocasiones contra los funcionarios para evitar su captura. Como resultado del ataque, un Inspector de Policía y dos agentes de la Dirección Nacional de Fuerzas Especiales (DNFE) resultaron heridos y fueron trasladados de inmediato a un centro hospitalario, donde actualmente se encuentran estables.

Diversas fuerzas policiales se unieron para capturar al agente

Inmediatamente, se activó un cerco de seguridad con personal de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), Fuerzas Especiales y unidades tácticas Karnaf, logrando controlar la situación y capturar al agresor, quien fue neutralizado tras un breve enfrentamiento.

Durante la requisa del detenido, se le decomisaron varios objetos comúnmente asociados a prácticas de brujería popular. Entre estos se encontraban cruces, rosarios, envoltorios de tela y plástico con contenidos ocultos, así como pequeños amuletos confeccionados artesanalmente. Según expertos en prácticas populares y rituales criminales, este tipo de artefactos se utilizan para rituales de protección en enfrentamientos armados, frecuentemente empleados por mareros, pandilleros o personas vinculadas al crimen organizado.

Se presume que el funcionario portaba estos objetos con la intención de protegerse espiritualmente ante posibles enfrentamientos con las fuerzas de seguridad o para causar daño a otros. Este hallazgo evidencia cómo incluso personas con formación y experiencia en instituciones de seguridad recurren a tales prácticas, buscando obtener supuesta invulnerabilidad o ventaja en contextos de violencia.

La Policía Nacional lamenta y condena este hecho, reafirmando su compromiso de garantizar el cumplimiento de la ley sin distinción de cargos, y reitera que ningún funcionario, sin importar su investidura, está por encima de la ley.

El detenido será puesto a disposición del Ministerio Público para enfrentar los cargos correspondientes por los delitos de violencia doméstica, atentado contra la autoridad, homicidio en su grado de tentativa y portación ilegal de armas, además de investigarse la procedencia y propósito de los objetos decomisados.

La Policía Nacional continuará fortaleciendo sus operaciones preventivas y de control, protegiendo a la ciudadanía y combatiendo toda manifestación de criminalidad, incluso desde dentro de las mismas instituciones de seguridad.

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