Michel de Nôtre-Dame, conocido popularmente como Nostradamus, ha dejado perplejos a muchos con la precisión de una de sus predicciones para 2024.
El célebre profeta del siglo XVI, Nostradamus, famoso por su obra «Les Propheties«, (Las Profecías), publicada en 1555, parece haber anticipado un reciente y devastador evento sísmico.
El pasado 1 de enero, un terremoto de magnitud 7.6 sacudió la península de Noto en Japón, provocando una alerta de tsunami en la costa occidental del país.
Este sismo causó daños significativos en edificaciones y dejó a seis personas sepultadas bajo los escombros según informó la agencia de noticias EFE.
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La magnitud del desastre y su impacto en la población japonesa han llevado a muchos a recordar y reflexionar sobre las enigmáticas predicciones de Nostradamus.
En ‘Les Propheties‘, Nostradamus escribió: «La tierra seca se volverá más seca y habrá grandes inundaciones». Muchos han interpretado esta frase como una alusión a la combinación de sequías e inundaciones causadas por terremotos y tsunamis, como el que recientemente afectó a Japón.
Además, el profeta mencionó que en este año también se produciría una «gran hambruna a través de una ola pestífera«, lo que algunos creen que se refiere a las consecuencias de desastres naturales como el terremoto.
El impacto de este evento ha llevado a una comparación inevitable con otra figura famosa de sus predicciones: Baba Vanga, la clarividente búlgara que predijo el devastador tsunami del Océano Índico en 2004, uno de los más catastróficos de la historia.
Según sus visiones, un desastre aún mayor podría ocurrir en 2024, describiendo un tsunami en Asia que sería cien veces más destructivo que el de 2004.
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Estas inquietantes predicciones, tanto de Nostradamus como de Baba Vanga, han generado preocupación y especulación sobre lo que podría deparar el resto del año.
Mientras Japón y el mundo se recuperan y preparan para posibles futuros desastres, las antiguas profecías siguen capturando la imaginación y el temor del público.
