El YouTuber italiano conocido como Zazza el Italiano continúa su serie de exploraciones por los barrios más peligrosos del mundo. Esta vez, llegó a Honduras, específicamente a Tegucigalpa, donde ha publicado varios videos recorriendo sectores considerados “calientes”.

En uno de sus primeros clips, se le ve preguntando por el temido sector conocido como “El Infiernito”. Mientras camina e interactúa con los capitalinos, busca ubicaciones específicas señaladas como peligrosas, incluyendo también La Vega, otra zona con alta reputación de riesgo.

Lea También: Hondureña clama ayuda para menor de edad que sufre graves problemas de salud y que fue abandonada por su madre en Catacamas, Olancho

“Le aconsejamos que no vaya”, “Eso sí, esa zona es caliente todo el tiempo”, y “Le pueden hacer algo”, fueron algunas de las advertencias que recibió por parte de los ciudadanos en la calle. A pesar de ello, decidió continuar su camino solo, reconociendo que estaba nervioso y que no sabía qué esperar.

El video, que ya supera el millón de visualizaciones, muestra su paso por calles con casas humildes y ventanas fuertemente cerradas por motivos de seguridad. En un momento, un poblador le dio “jalón” hasta cierto punto, pero luego continuó solo: “Me estoy caga… porque no hay nadie”, expresó mientras se adentraba al Infiernito.

@zazzaelitaliano Te atreverías a entrar solo AQUÍ? 😳 #zazzaelitaliano #honduras ♬ suono originale  – zazza el italiano

Lea También: Video de niños agrediendo a misioneros de la iglesia mormona causa enojo en redes sociales

Durante su visita a La Vega, tuvo una inesperada interacción con una menor de edad que le preguntó de dónde venía y qué hacía por la zona. “No han venido los chicos a intimidarme, vino esta niña”, dijo al salir, visiblemente sorprendido por la situación.

@zazzaelitaliano Una NIÑA me intimida 😳☠️ #zazzaelitaliano #honduras ♬ suono originale  – zazza el italiano

El creador de contenido ha documentado cada momento con una mezcla de humor, tensión y respeto hacia los vecinos que encuentra en su camino, generando debate en redes sociales sobre los límites entre el turismo urbano extremo y la exposición a zonas de alta vulnerabilidad.