En Choloma, Cortés, la empresa Kedal Movil Energy Company (KMEC) se encuentra en el centro de una nueva controversia financiera que ha dejado a más de 200,000 hondureños sin acceso a sus ahorros.

En medio de una creciente ola de esquemas fraudulentos que han afectado a la población hondureña, Kedal Movil Energy Company (KMEC) se convierte en el más reciente caso que ha puesto en jaque la confianza de miles de ciudadanos.

La empresa, que operaba en Choloma, Cortés, sin autorización legal, ha dejado a más de 200,000 personas sin acceso a sus ahorros, repitiendo patrones similares a los ocurridos con el caso de Inversiones Koriun.

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KMEC hacía grandes propuestas

KMEC ofrecía retornos económicos significativos en un corto período de tiempo. A cambio, los usuarios debían realizar una inversión inicial de 15,600 lempiras, con la promesa de recibir ganancias en cuestión de semanas.

Para muchos, la propuesta representaba una oportunidad de progreso financiero rápido; sin embargo, detrás de la atractiva fachada se escondía un modelo sin respaldo legal ni regulación financiera.

Como ha sucedido con otros esquemas piramidales, la empresa no contaba con autorización de la Comisión Nacional de Bancos y Seguros (CNBS), lo cual la dejaba fuera de cualquier tipo de fiscalización y, sobre todo, sin garantías para los fondos de los participantes.

El caso de KMEC no solo ha dejado en evidencia la vulnerabilidad de los ciudadanos ante estafas bien disfrazadas, sino también la urgencia de fortalecer los mecanismos de control y educación financiera en el país.

Las autoridades han reiterado que no existe un marco legal que proteja a las personas que invierten en este tipo de esquemas no regulados, lo cual los deja completamente expuestos a perder su dinero.

Este nuevo colapso en Choloma revive el trauma de otras estafas recientes que operaban con la misma lógica: prometer lo imposible, captar fondos masivos y desaparecer dejando destrucción financiera. La falta de supervisión y la necesidad económica de miles de hondureños se convierte en el terreno fértil para estos negocios fraudulentos.