El titular de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE), Erick Tejada, informó que la estatal proyecta cerrar el año 2024 con ingresos cercanos a los 4 mil millones de lempiras, lo que representaría un aumento del 3% respecto al año anterior. Tejada destacó la importancia de realizar una depuración de la cartera de mora para mejorar la eficiencia financiera de la empresa y garantizar su sostenibilidad a largo plazo.

En paralelo, el Congreso Nacional de Honduras continúa debatiendo un proyecto de ley que incluye 18 adendas a los contratos de energía. Sin embargo, aún no se ha logrado consenso entre los legisladores.

Ángel Hernández, representante de la Sindicato de Trabajadores de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (STENEE), criticó la demora en la aprobación de estos contratos, señalando que la ENEE ha perdido una considerable cantidad de dinero por esta falta de acción. Según Hernández, las modificaciones propuestas mejorarían tanto la situación financiera de la ENEE como las tarifas de energía para los hondureños.

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Por su parte, Santiago Herrera, gerente de Política Económica del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) subrayó que la deuda acumulada de la ENEE con los generadores de energía supera los 25 mil millones de lempiras. Herrera recordó que una gran parte de esta deuda ya está vencida, y que el atraso en los pagos afecta tanto a los proveedores como a la estabilidad del sector energético en el país. La resolución de este problema, según el experto, es esencial para evitar mayores dificultades en el futuro cercano.

A pesar de los desafíos financieros que enfrenta la empresa, Erick Tejada anunció que el gobierno de Honduras ha dado un paso importante para reducir la deuda de la ENEE. El pasado 26 de noviembre de 2024, el gobierno liquidó 2 mil millones de lempiras de la deuda con los generadores de energía, lo que representa un alivio parcial para la empresa estatal. Además, Tejada aseguró que se espera cumplir con un pago total de 11 mil 500 millones de lempiras hacia finales de este año.

El panorama sigue siendo complicado, pero las autoridades parecen comprometidas en resolver la situación de la ENEE. A medida que avanzan las negociaciones en el Congreso y se realizan esfuerzos para reducir la deuda, queda claro que la reforma del sector energético y la optimización de sus operaciones serán claves para garantizar el suministro y la estabilidad económica en Honduras.

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