El proceso preelectoral en Honduras se ha visto marcado por un preocupante nivel de violencia, generando alarma entre analistas y ciudadanos.
La conflictividad política, que suele manifestarse en diversas fases del proceso electoral, ha tenido su punto álgido en la etapa previa a las elecciones internas, con incidentes violentos que han cobrado vidas y generado enfrentamientos dentro de los principales partidos políticos.
Lea También: Políticos que han perdido la vida a menos de 20 días de las elecciones internas en HondurasEl analista político Kenneth Madrid, en su intervención en en el foro de Canal 11, LA ENTREVISTA con el licenciado Raúl Valladares, expuso que la violencia política no es un fenómeno aislado, sino que se ha manifestado de manera constante a lo largo de este periodo. Señaló que los politólogos advierten que los actos violentos suelen intensificarse en tres momentos clave: la etapa preelectoral, el día de los comicios y el periodo posterior a las elecciones.
Señaló el asesinato de un precandidato del Partido Libertad y Refundación (Libre) en un municipio de Comayagua y el hallazgo sin vida de una aspirante a diputada del Partido Nacional en San Luis, evidencian la escalada de violencia. A esto se suman los recientes homicidios de dos precandidatos más, lo que refleja una tendencia preocupante en la contienda política.
Los conflictos no solo han surgido entre partidos rivales, sino también a lo interno de cada organización política. En el Partido Nacional y el Partido Liberal, los enfrentamientos entre facciones han sido evidentes, mientras que en Libre los colectivos han protagonizado disputas internas. La pugna ha sido también un foco de tensión desde el inicio del proceso en el Consejo Nacional Electoral (CNE).
El analista opina sobre violencia previo a elecciones internas en Honduras:
Según Madrid, la violencia política se ha recrudecido, con ataques entre liberales y nacionalistas. En Libre, aunque el panorama parece más definido en cuanto a la candidatura principal, las tensiones persisten. Ante este escenario, analistas y ciudadanos coinciden en la urgencia de medidas que garanticen un proceso electoral seguro y transparente.