El pasado martes 24 de diciembre, el Papa Francisco protagonizó un evento cargado de simbolismo al abrir el llamado «Portal Sagrado», un acto que marca el inicio de un tiempo especial en la iglesia católica.

Este gesto solemne tuvo lugar en el marco del jubileo 2025, un evento religioso que congrega a millones de fieles de todo el mundo cada 25 años.

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El Portal Sagrado, conocido también como Puerta Santa, es un acceso especial en las principales basílicas papales de roma.

Solo se abre durante los años jubilares y simboliza la entrada al camino de salvación y reconciliación con Dios, en cada jubileo, se estima que cerca de 32 millones de peregrinos atraviesan esta puerta enorme de bronce ornamentada.

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 Además, el Papa Francisco inauguró, por primera vez en la historia, una puerta santa en una prisión.

El 26 de diciembre, el pontífice abrió «el quinto portal sagrado» en la cárcel romana de Rebibbia, un gesto simbólico que subraya la importancia de la misericordia y la inclusión, extendiendo la gracia divina a aquellos que se encuentran privados de libertad.

El papa invita a todos los presos a mirar al futuro con esperanza este rito inédito tuvo lugar el 26 de diciembre, en la festividad de San Esteban, en la misma cárcel que el pontífice visitó en 2015 durante el ritual pascual del lavatorio de los pies, reafirmando su compromiso con los más marginados y su mensaje de redención y misericordia.