El presidente venezolano Nicolás Maduro vota y se ha comprometido a respetar los resultados de las elecciones en las que busca un tercer mandato de seis años.
«Reconozco y reconoceré al árbitro electoral, los boletines oficiales y haré que se respeten», afirmó Nicolás Maduro mientras vota en Caracas. Además, instó a los otros candidatos a respetar los resultados emitidos por el Consejo Nacional Electoral (CNE).
«Palabra santa la del árbitro electoral, y llamo a los 10 candidatos presidenciales (…) a respetar, a hacer respetar y a declarar públicamente que respetarán el boletín oficial del Consejo Nacional Electoral«, manifestó el candidato.
El mandatario expresó su deseo de que «triunfe el bien» en un proceso que, según él, se ha desarrollado en paz. «Dije que iba a llegar en paz y en paz llegó (la elección).
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Si hay algo que preservar y defender es la paz, la armonía, la convivencia de los venezolanos», comentó a la prensa mientras vestía una chaqueta con los colores de la bandera venezolana. Maduro estuvo acompañado por su esposa y directiva del partido de gobierno, Cilia Flores.
Maduro también destacó que el proceso electoral es una elección entre «los que odian y quieren venganza y quisieran violencia y los que amamos y queremos a Venezuela».
Pidió a la comunidad internacional que respete el resultado de las elecciones y afirmó que «Venezuela decidirá sin que nadie se meta en nuestra decisión».
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Además, resaltó que ningún candidato sufrió ataques físicos durante la campaña electoral, comparando la situación con otros países de América Latina donde han ocurrido incidentes violentos.
«El único candidato perseguido se llama Nicolás Maduro Moros, perseguido internacionalmente por los poderes del mundo, por Goliat. En las redes, baneado, fuimos rompiendo el baneo», aseveró.
Con esta votación, Maduro busca reafirmar su poder en un país marcado por la crisis económica y política, mientras la comunidad internacional observa atentamente el desarrollo y los resultados de estas elecciones.