La enfermera Lucy Letby fue condenada a cadena perpetua por haber asesinado a 7 bebés con inyecciones de insulina en una unidad neonatal.
El hecho sucedió en el Reino Unido, donde la enfermera también fue culpada de intento de asesinato de otros 6 bebés en el Hospital Countess of Chester.
La mujer inyectó aire a unos bebés, alimentó algunos a la fuerza con leche y envenenó a otros dos pequeños con insulina.
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Letby estuvo siendo investigada desde septiembre del 2016 y desde el año 2020 permaneció en prisión preventiva en 6 diferentes centros de detención.
En el juicio que comenzó en octubre del 2022, la fiscalía presentó como prueba una hoja con anotaciones variadas que encontraron en la casa de Lucy.
El papel tenía garabatos por todas partes e incluía frases como: “SOY MALA, LO HICE. Los maté a propósito porque no soy suficientemente buena, no merezco vivir, soy una persona horrible”.
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La fiscalía lo presentó como una confesión, sin embargo, la defensa argumentó que era un “grito de desesperación y petición de ayuda” escrita por alguien que habría sido acusada injustamente.
Tiempo después se supo que ese no era el único escrito que había dejado la enfermera, pues encontraron otras anotaciones que decían: “Por favor, ayúdenme, ya no puedo hacer esto, odio mi vida, quiero que alguien me ayude, pero no pueden”.
La acusada fue declarada culpable de dos cargos de asesinato y no se pudo llegar a un veredicto sobre otras seis acusaciones de intento de asesinato.
Redactora de Once Noticias Digital.
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