Mike Tyson, cuya vida y rostro cuentan la historia de una carrera llena de altibajos, vuelve al cuadrilátero esta noche, marcando su regreso al boxeo profesional después de 19 años y 5 meses de retiro. La pelea, programada para después de las 23 horas, lo enfrentará al polémico estadounidense Jake Paul, un influencer que ha convertido su éxito en redes sociales en un trampolín hacia el mundo del boxeo.

La Comisión de Licencias y Regulaciones de Texas autorizó a Tyson a recuperar su licencia de boxeador profesional, permitiendo que este ícono del deporte vuelva a la acción. Este combate ha generado opiniones encontradas: mientras algunos ven en Paul un rival poco creíble, otros destacan su habilidad para atraer la atención del público joven dependiente del fenómeno digital del «like».

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Con 58 años, Tyson busca demostrar que aún tiene la fuerza y la técnica que lo hicieron leyenda, en un enfrentamiento que promete dividir audiencias entre la tradición del boxeo y las nuevas formas de entretenimiento.

Dos millones pagarán por pelea

La pelea oficial será parte de una cartelera internacional que se llevará a cabo hoy en el AT&T Stadium, en Arlington, cerca de Dallas, con capacidad para 80 mil espectadores. Un hecho destacado de este evento es la venta de un paquete VIP por dos millones de dólares, anunciado por la empresa Most Valuable Promotion, liderada por Paul.

Este paquete fue adquirido por la firma de abogados Tork-Law, uno de los grupos legales más poderosos del mundo. Doce abogados estarán ubicados junto al cuadrilátero y vivirán de cerca los momentos previos y posteriores al combate.

El enfrentamiento entre Tyson y Paul tendrá reglas completamente diferentes a las del boxeo profesional. El combate constará de ocho rounds de dos minutos cada uno, en lugar de los tres tradicionales para los hombres, y los boxeadores usarán guantes grandes de 14 onzas, en lugar de los habituales de 10.

Tyson y Paul recibirán 40 millones de dólares cada uno, según los estimados de los promotores, una cifra que pone en duda la lógica del enfrentamiento. El morbo ya comenzó antes del combate, cuando Tyson abofeteó a Paul en el pesaje, luego de que este último subiera al escenario gateando y pisara al excampeón mundial.

Tyson el campeón más joven del mundo

Tyson, fue el campeón mundial más joven de la historia, sigue siendo un ícono a pesar de haberse retirado en 2005. A sus 57 años, con 50 victorias (44 por KO) y 6 derrotas en su carrera, el exboxeador permanece en el recuerdo por su imparable ascenso en el ring. Su última pelea, en 2003, fue un triunfo ante Clifford Etiene, y desde entonces solo hizo una exhibición ante Roy Jones en 2020.

Recientemente, en el programa CountDown de Netflix, Tyson compartió detalles de su internación en mayo, que obligó a posponer un combate previsto para junio. El boxeador reveló que sufrió una úlcera estomacal grave, lo que le provocó vómitos de sangre y lo llevó a recibir transfusiones de urgencia. “Podría haber muerto, pero me recuperé bien”, dijo Tyson, dejando claro que su legado sigue intacto, y que, si su final llega, será en el ring.

El Departamento Deportivo de Texas fiscalizará la pelea entre Tyson y Jake Paul, que, a pesar de haber sido inicialmente planteada como una exhibición, se transformó en combate profesional con el respaldo del gobierno local. La pelea se incluirá en las pizarras de apuestas universales, con Paul como favorito 2 a 1.

Jake Paul, de 27 años, acumula un récord de 10 victorias (7 por KO) y una derrota, mientras que Tyson no ofrece garantías físicas tras su reciente internación. Los fanáticos enfrentan una gran incertidumbre, similar a la expectación que se vivió con leyendas como Whitney Houston o Elvis Presley en sus últimas actuaciones.

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