Los hoteles de la capital galesa se encuentran a reventar. El camping se presenta como la única opción para alojarse previo a la gran final de Champions League
Cardiff ya luce, huele y respira a final de la Champions. El primer desembarco de los 40.000 aficionados de Madrid y Juventus que se esperan empezó a tomar la capital galesa y pobre del que llegue sin alojamiento. Ayer se pedían 1.417 euros por una habitación de hotel. El precio medio ha subido ¡un 900 %! El mayor núcleo de fans va a compartir las enormes explanadas de Fields Park Road.
Los que se han beneficiado son los dueños del macro-camping Camp Cardiff, la última esperanza para los hinchas con menos bolsillo o ganas de desembolsar los estratosféricos precios que se están pidiendo en hoteles y apartamentos particulares. Una casa para seis personas, en las afueras de la ciudad, batió el récord desde que se anunció que la capital galesa elegiría el próximo campeón de Europa: piden 14.998 euros por el alquiler durante el fin de semana.
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Camp Cardiff asumirá el gran flujo de hinchas. En un terreno cedido por el Consejo de Cardiff, con capacidad para mil personas y a 2,5 kilómetros del National Stadium of Wales, madridistas y bianconeri tendrán que convivir en paz y armonía campestre. No les quedará más remedio. “Lo tenemos reservado casi al completo y el 51% de las reservas son de aficionados de la Juventus, el resto es de gente del Madrid”, nos cuenta Tessa, una de las responsables.
En el mini tour, desgrana los precios. Es un camping a precio de hotel de cinco estrellas. La noche en una tienda básica para dos sale a 150 libras (172 euros). Hay hasta zona VIP con chill out. Ahí, la cosa se dispara. Una burbuja en la que apenas caben dos camas individuales sube a 400 libras (469 euros) y, por último, los veinte tipis indios Premium, a 500 libras (576 euros) la pernocta.
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Las locuras que provoca el fútbol son únicas y nos imaginamos que las personas que sienten esa pasión no les importará pasar estas horas al aire libre por ver a su equipo favorito tocar el terreno sagrado de una final de Champions League.
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