La hondureña, junto a su esposo e hijo, traicionaron a la familia que les dio posada y huyeron con el dinero.
Doña Erlinda Rivera Zeas, de 37 años y su familia residente de Villa Valencia, Jinotega en Nicaragua le abrieron las puertas de su hogar a la catracha que llegó junto a su pareja e hijo.
La familia víctima relató que la hondureña Astrid Ninosca Espinal Reyes, de 27 años, aprovechó el momento en el que salieron de la casa para buscar dinero e irse.
la mujer se llevó 30,000 córdobas en efectivo (20,189 lempiras) y 280 dólares (equivalentes a L6,933), también se llevó una cadena de plata.
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Ante la denuncia interpuesta por la familia, las autoridades locales han emitido una orden de captura contra Espinal Reyes y están llevando a cabo las investigaciones necesarias para localizarla.
Doña Erlinda espera que pronto se de con el paradero de ellos y así recuperar la perdida material que sufrió por su solidaridad con la familia.
«Jamás imaginé que nuestro gesto de solidaridad sería correspondido con tal deslealtad», expresó doña Erlinda a Stereo Romance, medio de comunicación nicaragüense.
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