Ellos cruzaron por el puesto fronterizo de San Isidro, California, para presentarse ante las autoridades migratorias, con la esperanza que su solicitud de asilo va a ser atendida.
Una mujer con embarazo riesgoso, madres con hijos pequeños, niños enfermos y mujeres transgénero, figuran en este primer grupo de migrantes que logran pasar la frontera estadounidense.
Estos centroamericanos se han acogido al derecho internacional de solicitar asilo, la incongnita es si la oficina de Aduanas y Protección Fronteriza atenderá estas peticiones; aunque una portavoz adelantó que ya llegaron a la capacidad límite de recepciones.
Itsmania Platero, representante para Honduras de la organización Amnistía Internacional, reconoció que el argumento de violencia en sus respectivos países en si mismo no representa una garantía que la solicitud resultará aceptada. “Pero si la ley les otorga el derecho internacional que es inviolable a que ellos presenten las pruebas”, manifestó Platero.
El gobierno estadounidense ya había mencionado que los integrantes de esta caravana habían sido entrenados para enfrentarse ante las cortes de ese país, “y que allá iban a ser escuchados los que dijeran la verdad y presentara documentos reales”, expresó la representante de Amnistía Internacional.
Para ella, esta caravana ha dejado de manifiesto la cruel y despiadada realidad que vive la población en Honduras y los demás países del norte centroamericano, porque la mayoría de estas personas huyen del crimen organizado, de la violencia y también de la miseria.
¿Puede el gobierno de Honduras detener este flujo constante de compatriotas que huyen del país?
¿Usted qué opina?