Durante su visita a la capital industrial para supervisar centros asistenciales que servirán a pacientes de COVID-19, el presidente hondureño, Juan Orlando Hernández manifestó que el virus llegó para quedarse, y que posiblemente nos ataque a todos.
El presidente Hernández asegura que “si nos va a pegar a todos lo que tenemos que hacer es cuidarnos para que se dé espaciados. Lo bueno es que a muchos nos pegará leve y ni siquiera lo van a sentir”.
Explicó que los comercios que permanecen cerrados, solo podrán abrir sus puertas cuando el pueblo demuestre conciencia para seguir las medidas de bioseguridad respectivas.
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Por otra parte, instó a la población a evitar estigmatizar a la población que contrajo la enfermedad.
“No se les olvide la solidaridad y compasión con el prójimo, con su familia. También sabemos que tenemos que levantar la economía, pero primero hay que unirnos todos. Esto vino a cambiar el mundo.
Ante esta situación, expresa que los hondureños deben sacrificarse por el bienestar de todos.
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