Se acerca diciembre y con él, la navidad. Para está época, los padres de familia desde ya se preparan para comprar o regalar juguetes que llenen de ilusión a los pequeños de la casa. Sin embargo, si no se tiene cuidado, el uso de ciertos productos puede convertirse en toda una tragedia.
Para evitar lo anterior, lo invitamos a tomar en cuenta los consejos de la Directora del Hospital de Niños, la Dra. Olga Arguedas.
Para empezar es necesario tomar en cuenta la edad del niño o niña a la que se le va hacer entrega del juguete. Para cada edad, existen juegos seguros y apropiados. Generalmente se dividen de la siguiente manera: Juguetes para bebés de 0 a 12 meses, juguetes para niños de 12 meses a 3 años, juguetes para niños de 3 a 8 años y juguetes para niños de más de 9 años.
Cuando tenemos claro la edad, es importante contemplar que el juguete no cuente con piezas pequeñas que permita ser introducidas en alguna parte del cuerpo, especialmente en la boca, esto ayuda a evitar que se presenten casos de sofocación o que los aspiren y alojen en sus vías respiratorias causándoles daños graves o la muerte.
Pero no sólo la edad es importante, la estatura también lo es. En ocasiones suele comprarse juguetes un poco más grandes de lo requerido actualmente, sin embargo esto aumenta el riesgo de accidentes en los pequeños.
Es importante además que los juguetes puedan ser lavables para así poder combatir las bacterias del medio ambiente que puede causarle algún tipo de enfermedad o virus al menor. De igual forma asegurarse que el producto sea anti fuego para evitar posibles explosiones o quemaduras.
Si el objeto que se quiere regalar cuenta con costuras, es necesario que estás sean firmes y no permitan la extracción de algún material que se encuentre dentro, así también se debe asegurar de que los aditamentos como ojos, nariz y boca estén bien pegados y no se desprenda.
Si el juguete utiliza batería para su funcionamiento, lo recomendable es que la tapa de seguridad cuente con tornillos que impidan retirarla fácilmente, para evitar que estás sean introducidas en la nariz o se las traguen, ya que los componentes químicos actúan muy rápido destruyendo los tejidos, lo que constituye una emergencia médica.
El evitar que los bordes de los juguetes sean punzo cortantes también debe tomarse en cuenta, pues así se reduce el riesgo de una cortadura en el menor.
En el caso de los juguetes que cuentan con cuerdas de halar, estás no deben superar los 30 centímetros, ya que al extenderse esa medida se corre el riesgo de estrangulamiento.
Las etiquetas sobre la marca del fabricante deben de estar presentes en el artículo, así se brinda una garantía de los estándares de seguridad del mismo.
La experta recomienda, pensar en juguetes que ayuden a estimular las habilidades visomotoras y sociales para que sepa disfrutar en grupo, negociar y adquirir hábitos como el orden. Además, aconsejan que los niños no deban exponerse más de dos horas a los equipos con pantalla donde se suman los minutos de televisión, celular, tabletas y juegos electrónicos que hagan ejercicio e interactúen con amigos reales en lugar de los virtuales.
Pero no sólo con los juguetes nuevos debe tenerse precaución, aunque estos parezcan encontrarse en buen estado, es posible que ya no cumplan con las normas de seguridad y podrían desprendérseles algunas de sus piezas por lo que es mejor regalar juguetes nuevos y seguir las recomendaciones internacionales de seguridad que consta en las etiquetas.
En el mercado existen muchas opciones, pero es necesario contemplar estos cuidados para determinar cuales son los artículos que nunca debería comprarle a un niño.
Realmente interesante lo que comentas en tu artículo, volvere a pasarme por aqui, gracias