Sean Combs, conocido en el mundo artístico como Puff Daddy o Diddy, siempre ha sido un personaje envuelto en controversias.
Aparte de su éxito como rapero y productor, también se ganó una reputación por organizar algunas de las fiestas más descontroladas del mundo del espectáculo.
Pero, recientemente, su nombre se ha visto manchado por algo mucho más oscuro: su arresto el pasado 16 de septiembre de 2024, acusado de tráfico sexual y otros delitos graves.
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Desde hace años, habían rumores sobre las ‘freak off parties’ de Puff Daddy, eventos exclusivos que se realizaban en hoteles de su propiedad o, incluso, en su avión privado.
Estas fiestas, según reportes de las autoridades, duraban días enteros, y eran verdaderos despelotes. En ellas, la farándula se mezclaba con un ambiente lleno de excesos, donde supuestamente se distribuían sustancias ilícitas y las mujeres eran obligadas a participar en actos comprometedores.
Lo más impactante es que, según las investigaciones, Diddy también grababa todo lo que sucedía sin el consentimiento de los involucrados. Esas grabaciones, según los fiscales, eran usadas para chantajear a las víctimas y mantenerlas bajo control.
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A las famosas ‘freak off parties’ asistían algunas de las celebridades más conocidas de Hollywood, incluyendo nombres como Jay Z, Leonardo DiCaprio, Mariah Carey y Ashton Kutcher, además de otros personajes de alto perfil, como la mismísima Khloé Kardashian.
Pero, antes de estos escandalosos eventos, Puff Daddy era conocido por organizar las populares white parties (fiestas blancas, en español), unas reuniones donde todos los invitados tenían que vestir de blanco.
Estas fiestas eran más «light» y se realizaban, generalmente, en el Labor Day de Estados Unidos.
¿Qué pasó con Puff Daddy?
Lo que parecía un estilo de vida lleno de lujo y glamour se desmoronó con las graves acusaciones en su contra.
El 16 de septiembre, Puff Daddy fue capturado en Manhattan por cargos que incluyen tráfico sexual, asociación ilícita y otros delitos.
Según las autoridades, desde 2008, Diddy lideraba una empresa criminal que participaba en actividades como trabajos forzados y sobornos.
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Durante la investigación, se allanaron dos de sus propiedades, una en Los Ángeles y otra en Miami Beach, donde las autoridades incautaron suministros utilizados en las fiestas, como narcóticos y más de mil botellas de lubricantes y aceite para bebé. Además, encontraron varias armas AR-15.
Tras su captura, el rapero permanece detenido sin derecho a fianza y los fiscales aseguran que las pruebas en su contra son contundentes.
Algunos lo defienden, pero otros condenan su estilo de vida lleno de excesos. Lo que está claro es que las freak off parties han destapado una de las historias más turbias del mundo del espectáculo.
