Clemente Aguirre Jarquin fue librado milagrosamente de la inyección letal luego de pasar 14 años bajo prisión
El hondureño Clemente Aguirre Jarquin fue acusado de un crimen atroz el pasado 2004 donde les quitaron la vida a dos mujeres identificadas como Cheryl Williams y su madre Carol Bareis.
El bestial asesinato fue perpetrado a cuchilladas dentro de la casa rodante en La Florida, Estados Unidos.
El connacional conocía a las víctimas y al ver la puerta abierta en la madrugada decidió ingresar y agarrar el puñal porque pensaba que todavía se encontraba ahí el perpetrador del hecho.
Lea También: HOMBRE LIBRE: Confesión de hondureño lo salvó de la pena de muerteSin embargo, después de que el catracho miró la dantesca escena se refugió en su casa, también una rodante, no obstante, sus huellas se habían esparcido por toda la escena del crimen.
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El hondureño pasó desde el 2004 preso en una cárcel y pesaba una condena a pena de muerte, misma que se revocó tras pruebas que determinaron que ADN de la nieta e hija de las víctimas también se encontraba en la escena criminal y también la autora del doble crimen le expresó a una amiga que había cometido el hecho, finalmente la confidente declaró a las autoridades y terminó salvando al hondureño.
DATO:
Los hondureños que todavía penden con penas de muerte en su contra son: Johnny Morales, Edgardo Sánchez Fuentes, Carlos Manuel Ayestas y Seburt Connor.
En el año 2008 se ejecutó a Heliberto Chi Aceituno, en Texas, por asesinar a su exjefe, la víctima fue el último hondureño en enfrentar esa situación.
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