Tal y como lo dijo la noche de este martes el diputado Ottón Solís , durante la comparecencia del magistrado Celso Gamboa ante la comisión investigadora de los créditos del «Cementazo», desde la administración Chinchilla Miranda el empresario Juan Carlos Bolaños tiene problemas con el Estado, por tratar de hacer las cosas a su manera.
Esto lo confirmó la propia expresidenta de la República a través de un comunicado de prensa, donde explicó que Bolaños había presionado a la entonces presidenta de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), Vanessa Rosales, razón por la cual solicitó al jerarca de la Dirección de Inteligencia y Seguridad Nacional (DIS) Mauricio Boraschi, que hiciera un seguimiento del caso.
«Dichas gestiones las emprendí a raíz del traslado de preocupaciones que me realizó la Sra. Rosales, sobre presiones indebidas que venía recibiendo de parte del empresario y contratista de la CNE, Juan Carlos Bolaños. en relación de un reclamo de indemnizaciones», explicó Chinchilla.
Adicionalmente, la exmandataria señaló que es necesario siempre mantenerse vigilante para evitar que las gestiones de particulares afecten la labor de los funcionarios públicos.
«Es importante dejar sentado que posibles casos de corrupción, presiones a funcionarios para que actúen en un sentido concreto, tráfico de influencias, y similares; ponen en peligro la estabilidad de las instituciones del país, razón por la cual procedí de dicha manera».
Chinchilla niega también la versión del magistrado Gamboa, pues aseguró que no había archivo alguno sobre investigaciones contra el empresario del cemento.
«Como resultado de dichas gestiones, me consta que se elaboró un expediente que de acuerdo a nuestra legislación, debió haber quedado en los archivos de la DIS”.
Por último, Chichilla dejó claro que al menos cuando ella estaba en Casa Presidencial, Boloaños era non grato: «Evidentemente, ante las diligecncias por mí solicitadas, no era persona bienvenida».
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