La impotencia, el enojo y el dolor, se ven reflejadas en las fotografías del último adíos a la pequeña Fátima, quien fue violada y asesinada en México, cuyo cuerpo sin órganos fue encontrado hace apenas dos días.
Según las autoridades mexicanas, los principales sospechosos responden a los nombres de Gladis Giovana Cruz Hernández y a Mario Alberto Reyes Nájera, señalados por el delito de secuestro y homicidio de Fátima, fatalidad ocurrida en la alcaldía Xochimilco.
Las primeras indagaciones, la mujer raptó a Fátima al salir de la escuela, donde también estudian sus dos hijos; la llevó a la vivienda que fue allanada ayer y donde se encontró ropa de la víctima.
Según personas cercanas a María Magdalena, madre de la víctima, la raptora es una conocida, ya que aparentemente es la mamá de dos niños que estudian en la misma escuela donde estaba Fátima, y con quien había tenido problemas.
La dependencia investigadora solicitará una orden de detención para ambos, bajo el delito de “secuestro con la finalidad de hacer daño”, por el cual podrían alcanza una pena de 80 años, en caso de demostrar su culpabilidad.
Cientos de personas han realizado varias marchas exigiendo justicia en el caso de Fátima, que ocurrió a sola una semana del atroz asesinato de Ingrid Escamilla, una mujer que fue asesinada y descuartizada por su pareja luego de una discusión.
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