Hoy en horas de la tarde inicia el velorio y el funeral será celebrado por Mariano Fazio, vicario general de la prelatura del Opus Dei el viernes 7 de julio.
San Juan Pablo II tenía dos voces: una era la suya, voz de predicador, también de actor de teatro, que retumbaba en estadios y basílicas. La otra voz era la de Joaquín Navarro-Valls, su portavoz, voz tranquila, serena, directa, el primer laico y primer no italiano en ocupar el cargo de director de la Sala de Prensa de la Santa Sede.
Siempre con gran serenidad y capacidad de análisis, acompañó al papa Juan Pablo II en todos sus viajes y actos oficiales, y como portavoz vaticano confirmó oficialmente la muerte del pontífice en la noche del 2 de abril de 2005. Los años previos informaba con detalle de los problemas de salud del anciano Pontífice.
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Durante su etapa como director de la Sala de Prensa de la Santa Sede potenció y modernizó la Oficina de Prensa vaticana, que canaliza toda la información sobre la actividad del Pontífice y de los dicasterios de la curia.
Nacido en Cartagena (Murcia) en 1936, fue el responsable de comunicación durante 22 años (de 1984 a 2006). El 11 de julio de 2006, después de 22 años como portavoz del Papa dejó la dirección de la Sala de Prensa de la Santa Sede, pocos días después de acompañar a Benedicto XVI en su viaje a Valencia para participar en el Encuentro Mundial de las Familias.
Navarro-Valls se doctoró en Medicina por la Universidad de Granada en 1961, en las especialidades de Psiquiatría y Psicología Social. Más tarde, en 1968, se licenció en Periodismo por la Universidad de Navarra. Desde 1960 hasta 1974 colaboró en diversos periódicos y revistas de España y fue fundador de la revista «Diagonal» en Barcelona.
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