Un niño de apenas 10 años estuvo a punto de morir luego de caer a un profundo pozo de malacate en el barrio Calan de Siguatepeque.
Los padres del menor se percataron del incidente y de inmediato solicitaron ayuda al Cuerpo de Bomberos del lugar.
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Afortunadamente los rescatistas lograron sacarlo con vida; su familia pensaba que había muerto, por lo que recibieron con mucha sorpresa y alivio verlo con vida.
El pequeño fue trasladado al Hospital Santa Teresa, del lugar en mención, donde es atendido de sus lesiones.
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Según versiones el niño se encontraba jugando con sus amigos cuando accidentalmente cayó al lugar.
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