Las autoridades policiales capturaron este día a un marero, presunto cabecilla de la Mara Salvatrucha, que habría participado directamente en la fuga de Alexander Mendoza, alias “Porkys” a inicio de año en un Juzgado de El Progreso, Yoro.
La detención de este marero que responde al nombre de José Antonio Mejía, alias “Gasper”, se produjo en el mismo municipio donde hace unos meses ayudó a escapar al sanguinario líder de la MS-13.
Cabe mencionar que, este sujeto se encargaba de coordinar actividades delictivas tanto en El Progreso como en Tela.
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Según las investigaciones policiales, el ahora recluso tuvo implicación directa en la fuga de película en la que participaron al menos 20 pandilleros, y murieron alrededor de cinco policías.
Al momento de su captura, le confiscaron dinero en efectivo producto de la extorsión y una pistola, de la cual los agentes se encargarán de verificar sí se utilizó para cometer delitos.
Por lo tanto, lo remitirán a la fiscalía para que responda por las varias órdenes de captura que tiene en su contra, entre las cuales resalta ilícitos de portación ilegal de armas, homicidios y atentados.
Familiares cercanos son los principales agresores sexuales de menores
Diferentes estudios alrededor del mundo coinciden en que los principales agresores sexuales de menores están en su circulo más cercano, desde sus tíos, padrastros, abuelos, maestros y los propios hermanos.
Entre los estudios más destacados se encuentran el emitido por el Consejo Ciudadano de la Ciudad de México en el año 2013, que revela que los niños de entre dos y cinco años de edad, son los más propensos a ser víctimas de abuso sexual.
Por otro lado, en una Encuesta Nacional sobre la Dinámica de la Relaciones en los Hogares publicada por el Inegi en 2016, son los tíos y tías quienes encabezan la lista de los principales agresores.
Estos lideran con el 20.1% de menciones, luego están los primos y primas, con 15.7%, los hermanos y hermanas, con 8.5%, otros familiares, 6.4%, padrastro o madrastra, 6.3%, padre, 5.8%, abuelo o abuela, 3.7% y madre, 0.5%.
Indignación en Brasil
El aborto practicado a una niña de 10 años violada por su tío desató en Brasil una intensa disputa médica, política, judicial y religiosa.
La intervención fue realizada en la mañana del pasado domingo en Recife, en el estado de Pernambuco, después de que los médicos del hospital del estado de Espírito Santo se negaran a practicar el aborto por motivos de conciencia.
El aborto está permitido en Brasil solo en casos de violación, riesgo de muerte para la madre y feto anencefálico, pero es sujeto de gran controversia.
Según medios locales, los médicos alegaron que la edad gestacional no estaba “respaldada por la legislación vigente”, al haber superado el embarazo las 22 semanas.
En paralelo, grupos “provida” y simpatizantes del presidente brasileño Jair Bolsonaro, recurrieron a la Justicia para intentar evitar el aborto, pero esta dio la razón a la niña y su familia.
“La voluntad de la niña es soberana”, afirmó el juez Antonio Moreira Fernandes, del Tribunal de Justicia de Espírito Santo.
¿Usted qué opina?