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(Video) Madre hondureña implora perdón en Estados Unidos

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Etehel García perdió dos hijos víctimas de la violencia y dejaría otros dos hijos en EE.UU. si es deportada.

Etehel García ha vivido 28 como inmigrante en Estados Unidos y hoy enfrenta una orden de deportación. Foto: La Opinión

Una madre hondureña residente en la ciudad de Los Ángeles, vive un terrible drama al enfrentarse cara a cara con la deportación.

Etehel García Espinoza (49) nunca había sentido tanto miedo como el que experimenta en este momento, cuando las leyes de inmigración de los Estados Unidos pueden darle un revés a su vida.

García Espinoza lleva 28 años viviendo como ilegal en la nación del norte, pero la sigue un pasado trágico.

Salió de Honduras en 1989 y llegó a Estados Unidos con su esposo, de quien se separó por maltrato y violencia doméstica.

Me pegaba, me golpeaba toda la cara y me violaba. Hacía lo que quería conmigo. Yo tenía 22 años. No sabía qué hacer”, recordó la mujer.

Su situación migratoria se complicó cuando ella y su entonces esposo faltaron a una cita en la corte de migración en 1993. Al no presentarse a la Corte, le giraron una orden de deportación.

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Luego, la tragedia tocó de nuevo su vida cuando en junio de 2013, le asesinaron a su hijo mayor, Edwin Jiménez García de 25 años en Honduras. Su muerte todavía permanece impune.

Lo mataron cuando se negó a meterse en las pandillas. Él les dijo que no podía porque tenía mujer y una niña”, contó la mujer.

Dos años después, en 2015, mataron a Junior Jiménez, su segundo hijo, durante una pelea en Long Beach.

Su hijo tenía 22 años de edad y había nacido en Texas. “Un hombre le dio un botellazo. El asesino ya está preso”, relató.

Etehel se desahoga con el retrato de sus hijos muertos víctimas de la violencia. Foto: La Opinión

La hondureña se quedó con sus dos hijos menores: Leonel de 21 y Kimberly de 18 años, quienes nacieron en Los Ángeles.

Para Etehel todo cambió desde la muerte de sus hijos, «no puedo dormir, me siento muy nerviosa. Tengo que estar tomando pastillas para mi depresión y los nervios. Solo les pido a los agentes de migración que me den una oportunidad de quedarme en el país”, suplicó la mujer en una entrevista a un medio internacional.

Y agregó que teme regresar a Honduras porque la pueden matar, «quiero permanecer aquí al lado de los dos únicos hijos que me quedan, y mis dos nietos Zoe y Daniel. Ellos son hijos de mis hijos asesinados».

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Etehel se tendrá que presentar en la Corte el próximo 26 de junio, en la que decidirán su suerte en Estados Unidos.

Su defensa explicó que están solicitando dos perdones, «uno por no acudir a la cita en la Corte Migración que le resultó en deportación, y otro por permanecer sin documentos en el país».

Al tiempo que manifiestan que “una vez que le den los perdones, ella puede solicitar su residencia ya sea a través de un asilo político, o una petición familiar de su esposo residente y de su hijo mayor de 21 años”.

La cadena Telemundo, visitó a la hondureña hasta su humilde casa en el sur de Los Ángeles donde una vez más revivió la difícil y dura situación a la que se enfrenta desde hace varios años.

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